Museo Artequin: donde el arte cobra vida para niños, jóvenes y familias

Ubicado en Av Portales, en un edificio declarado Monumento Nacional, el Museo Artequin es uno de los espacios culturales más vibrantes, educativos y coloridos de Santiago. Diseñado especialmente para acercar el arte a niños y jóvenes, Artequin combina creatividad, aprendizaje y juego en una fórmula única que lo convierte en un panorama familiar imperdible.

Desde su fundación en 1993, el museo se ha propuesto derribar la idea de que el arte es un tema reservado para expertos. Aquí, cada sala, actividad y obra está pensada para estimular la imaginación, fomentar la curiosidad y demostrar que todos podemos disfrutar —y crear— arte.

Un museo pensado para aprender jugando

Lo que diferencia a Artequin de otros museos tradicionales es su innovador enfoque pedagógico. A través de réplicas de obras maestras del arte universal, talleres interactivos y materiales didácticos, el museo invita a los visitantes a conocer y reinterpretar la historia del arte desde una perspectiva lúdica y accesible.

Entre sus propuestas destacan:

• Gigantescas reproducciones de obras icónicas, como piezas de Van Gogh, Monet, Dalí o Kahlo.

• Talleres creativos que cambian cada mes, enfocados en técnicas como collage, pintura, escultura, grabado o experimentación con luz y color.

• Actividades guiadas por educadores especializados que adaptan el contenido a cada edad.

• Programas especiales para colegios, que convierten al museo en una extensión interactiva de la sala de clases.

Todo el espacio está diseñado para tocar, explorar y crear, rompiendo la clásica prohibición de “no tocar” que suele caracterizar a otros recintos culturales.

Un edificio con historia y personalidad

Antes de ser museo, el edificio que alberga Artequin fue el Pabellón de Chile en la Exposición Universal de París de 1889 —la misma donde se presentó la Torre Eiffel—. Su estructura metálica y su diseño de inspiración neoclásica lo convierten en una obra arquitectónica única en el país.

Hoy, este entorno patrimonial se mezcla con colores vibrantes, instalaciones lúdicas y espacios multimedia que le dan al museo una estética moderna y alegre que encanta a niños y adultos por igual.

Exposiciones que conectan arte y emociones

Artequin no se limita a mostrar obras: las interpreta desde el juego, la sorpresa y la imaginación. Sus salas median la experiencia artística a través de preguntas y ejercicios que impulsan a los visitantes a observar, sentir y crear.

Las exposiciones temporales suelen abordar temas actuales o transversales para niños, como:

• El arte y la naturaleza

• La diversidad cultural

• La expresión a través del cuerpo

• La tecnología como herramienta creativa

Esto hace que cada visita sea distinta y refrescante.

Un lugar para crear, compartir y disfrutar

Además del recorrido permanente y los talleres, el museo cuenta con:

• Espacios al aire libre, ideales para actividades familiares.

• Eventos especiales, como vacaciones de invierno, verano y noches de museos.

• Un programa digital con recursos educativos descargables para casas y escuelas.

Todo esto reafirma su misión: democratizar el acceso al arte y convertirlo en una experiencia cotidiana, especialmente dirigida a niñas, niños y jóvenes.

¿Por qué visitarlo?

• Porque es uno de los museos más entretenidos y didácticos de Santiago.

• Porque su enfoque práctico motiva a los niños a expresarse y experimentar.

• Porque aprender arte nunca había sido tan fácil, visual y divertido.

• Porque el edificio es una joya histórica que vale la pena conocer.

El Museo Artequin es, en definitiva, un lugar donde el arte se vuelve cercano, emocionante y participativo. Un espacio perfecto para despertar la creatividad y mirar el mundo con nuevos colores.